Lo que si no me parece justificable desde ningún punto de vista es que estemos utilizando a nuestro querido alcalde como chivo expiatorio. Responsabilizamos al pobre por todos y cada uno de los huecos que habitan nuestras pistas. ¡Déjemos al pobre tranquilo! Estoy seguro que nuestro bienamado las tiene ya bastante difíciles, después de todo, ser alcalde de Lima es tan difícil como ser alcalde de Ciudad Gótica*. Además, existen muchas maneras de explicar la situación actual de la tres veces coronada. A mí se me ocurren algunas:
Explicación 1: Todo es un complot de los chilenos: como si no les bastase con el Huáscar, nuestro pisco y Wong, ahora se están llevando nuestras pistas de a poquitos.
Explicación 2: El gobierno ha entregado Lima en concesión a alguna petrolera.
Explicación 3: Una nave espacial extraterrestre se estrelló en los alrededores y un montón de robots japoneses gigantes estuvieron por acá buscándola.
Ok, quizás esa última sea un poco tirada de los pelos. Es más probable que Lima haya sido visitada por el individuo de la foto, considerando que estamos junto al mar y que los norteamericanos no pudieron acabar con él.

Ahora, los reto a que dejen al alcalde en paz y encuentren una explicación más probable que las mías.
PD: Escuchando Sálvame de RBD, que es lo más bajo que he podido caer sin tener un solo trago encima.
* Tenemos a los policías corruptos, a los políticos corruptos y a los mafiosos. Y no hay Batman.
Imagen: Cloverfield, de SevenCubed en Flickr.